Silvia Núñez Esquer
Ismene Figueroa López es una de las becarias del Instituto Sonorense de Cultura que participará en la capacitación para productores de video y cine, quien como producto de lo aprendido hará un documental con visión de género, sobre las representaciones culturales de las mujeres en el barrio El Coloso.
El Instituto Sonorense de Cultura y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, a través del programa Fondos Concursables dio a conocer que serán treinta las personas participantes en el Diplomado en Desarrollo de Proyectos Documentales que se realizará del 6 de mayo al 19 de junio de 2011.
El diplomado “Visiones en el desierto 2011”, tiene como propósito fomentar la capacitación, producción y difusión audiovisual independiente con fines culturales que fortalezca e impulse el conocimiento y la promoción del Patrimonio cultural y artístico de Sonora.
La Comisión de selección formada por Guadalupe Osuna Lizárraga, Mónica Luna Sayós e Ignacio Castillo Arvayo, revisaron sesenta y ocho propuestas de preinscripción recibidas, de las cuales eligió a treinta postulantes con solicitudes procedentes de los municipios sonorenses de Cajeme, Empalme, Nogales, Puerto Peñasco y Hermosillo.
Hará documental sobre mujer y cultura en El Coloso
Ismene Figueroa resultó seleccionada para recibir la capacitación en producción de documentales, y su proyecto busca documentar las formas en que las mujeres intervienen en los procesos de producción, circulación y apropiación social de los bienes culturales y los significados que los grupos sociales y las personas les atribuyen, delimitándolo al barrio El Coloso de Hermosillo, Sonora.
En la presentación de su proyecto, Figueroa López sostiene que el patrimonio cultural es una herencia, una relación con el pasado, valores, identidad, que no se define por sí mismo, sino que representa una construcción social compleja que representa ideologías en determinados contextos históricos, en la que intervienen grupos y sectores dominantes en la que tradicionalmente se ha manifestado la hegemonía del género masculino sobre el femenino.
Las mujeres han estado presentes en todos los procesos sociales, desde la conformación de barrios y comités vecinales, hasta fiestas tradicionales, gastronomía, movimientos sociales, artesanía, saberes ancestrales de medicina, religión, en fin, en todos los espacios públicos y privados donde se construye el patrimonio cultural. Sin embargo, su participación se ha invisibilizado históricamente, asegura.
El proyecto versará sobre el papel de las mujeres en la construcción del patrimonio cultural y las formas en que intervienen en los procesos culturales. A través de documental expondrá qué cosas valoran las mujeres en el ámbito privado en relación con: viviendas, trabajos, vecindarios y barrios, la ciudad, la calle, y los territorios.
En el ámbito público los relacionados a: historias e identidades, memoria colectiva, luchas y organizaciones, modos de vida y, saberes y oficios.
“Escogí el barrio el Coloso por su gran riqueza natural y cultural. Mujeres que salieron de sus pueblos originarios, y otras más jóvenes nacidas y criadas en ciudad, y madres que han visto emigrar a sus familiares a Estados Unidos, en busca del sueño americano” describe Ismene.
Al barrio lo considera importante pues en El Coloso se llevan cabo los más destacados rituales de cuaresma. Tiene un complejo deportivo que introdujo nuevas prácticas deportivas para el sector femenino.
En esa comunidad aún se utilizan prácticas comerciales que en otras partes de la ciudad han ido desapareciendo, como carros verduleros y tortilleros, elaboración de productos caseros de las mujeres del sector, y es una colonia sumamente valorada en periodos electorales, donde las mujeres cumplen roles como lideres comunitarias, finaliza.
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