Empresarios
mineros y proveedores trabajan por equidad de género en las minas
Silvia Núñez
Esquer
Omar Mazón |
En la segunda
reunión preparatoria del Foro de mujeres mineras a realizarse en 2013, el funcionario
de la mina ubicada entre Altar y Caborca, Sonora, indicó que obtuvieron el
certificado en Equidad de género por el Instituto Nacional de las Mujeres,
Inmujeres, en diciembre de 2011, después de superar varias deficiencias al
respecto, diagnosticadas previamente.
Explicó que el
Modelo de Equidad de Género, MEG, se obtiene como producto de un proceso que
lleva a la concreción de un Sistema de gestión para documentar equidad de
género. Los principales ordenamientos que se deben atender para obtener la certificación
son: no hostigamiento de ningún tipo; no discriminación a todo tipo de grupos
vulnerables, particularmente a las mujeres; y la igualdad de oportunidades.
Posteriormente deben elaborar un plan de
acción para dar cumplimiento a esos lineamientos, a través de una carta
compromiso con Inmujeres; se debe someter a un proceso de diagnóstico para
conocer el estado organizacional, así como del posible hostigamiento; se
realiza un análisis de la información obtenida; y finalmente se elabora un
manual que contiene el Sistema de gestión.
Mazón Figueroa
agregó que en el manual se debe establecer una política de Equidad de género, y
formar un comité de equidad de género. Se debe también establecer un mecanismo
sobre hostigamiento que incluye a proveedores y contratistas, y un
procedimiento para recibir quejas. Aunado a esto se debe realizar un plan
maestro de difusión dentro y fuera de la empresa.
Algunos otros
requisitos para la certificación son: el cumplimiento de acciones afirmativas
necesarias, derivadas del diagnóstico que ayuden a atender y solventar las
deficiencias que pueden ser externas o internas. En el caso del reclutamiento
de personal se debe adoptar un lenguaje no sexista para las vacantes. Como
ejemplo citó que ya no publican convocatorias que digan “Se solicita
supervisor”, sino “Solicitamos supervisor o supervisora”.
Otras acciones
que deben realizar son: un programa de capacitación en género, igualdad de
oportunidades, vida familiar y laboral, hostigamiento sexual, ambiente laboral,
y sensibilización en equidad de género.
El impacto que
este proceso de certificación de la Minera Santa Fé, mina El Chanate ha tenido,
se puede evaluar en el incremento de la contratación de mujeres en todos los
puestos, así como en oportunidades de desarrollo en puestos anteriormente
ocupados sólo por hombres, como lo es el manejo de maquinaria pesada, abunda el
Coordinador interno del programa de equidad de género.
Esto ha tenido
como consecuencia un incremento de menos de seis por ciento anterior a un diez
por ciento en la actualidad. Una revista interna y un video sobre equidad de
género son algunos de los productos que han surgido de esta certificación con
el objetivo de difundir el modelo de equidad de género.
Comentó que en
algunas áreas se nota más la política de equidad como la de mantenimiento y
trituración que es un área ruda, agresiva, en donde nunca se había visto a
mujeres trabajando, y hoy día igual trabajan entre el polvo, en lo grueso de la
minería, y puso como ejemplo a la minera Cristal Bernal.
También las
áreas administrativas, seguridad, en el puesto de Geóloga, y en la gerencia de
departamentos hay mujeres. El comité de equidad de género en su empresa se
compone de siete personas, hombres y mujeres, e
incluye un coordinador.
Finalmente mencionó
que en el diagnóstico del tema de ambiente laboral descubren áreas de
oportunidad, surgen las necesidades, y que hasta ahora lo que detectaron fue la
diferencia en salarios entre hombres y mujeres, ya que ellas ganaban menos
desempeñando el mismo trabajo. La solución fue elaborar una nueva descripción
de puestos en donde se introdujo el lenguaje no sexista y el monto salarial
único para el puesto.
El tema de la
necesidad de guarderías para las mujeres
mineras todavía no fue detectado dijo, pero si en adelante se encontrara la
deficiencia por la cantidad de mujeres con hijos que lo requirieran lo
subsanarían con una propuesta, ya que los mecanismos de quejas o sugerencias
siguen vigentes, y serán permanentes por lo que el proceso continúa hasta
lograr la equidad necesaria.
Recomendó a
otras empresas que implementen el Modelo de equidad de género ya que
tradicionalmente la sociedad es excluyente con las mujeres y en la minería es
fácil verlo. Lo más difícil no es el compromiso, ni adoptarlo en sí, sino los
trámites previos. Sin embargo, los puede llevar a muchos beneficios, aseguró.
Dolores Sosa coordinando la reunión preparatoria al Foro de mujeres mineras |
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