miércoles, 12 de marzo de 2008

Golpean a tres activistas defensoras del medio ambiente

Inician destrucción del Parque de Villa de Seris

Silvia Núñez Esquer

Hermosillo, Son., 10 de marzo 08.- Por lo menos tres activistas fueron golpeadas esta tarde en un operativo policiaco para entrar al Parque de Villa de Seris e iniciar el corte y extracción de árboles en donde será construido el complejo cultural y comercial Musas.

En la acción comandada por el director de Seguridad Pública Municipal, Ramsés Arce Fierro, varias personas que se han manifestado en contra de la destrucción del parque por considerar necesaria su existencia en un terreno desértico, como lo es el estado de Sonora, fueron agredidas por policías que portaban armas y chalecos antibalas, como los utilizados en los operativos para enfrentar a la delincuencia organizada.

La joven agredida Andrea Sánchez narró que un agente de Gobernación a quien sólo identificaron como de apellido Cota, intentó obstruir a empujones el trabajo del reportero de Radio Bemba Tadeo Leyva quien transmitía los hechos al público.

Fue en ese momento cuando las activistas intervinieron para protegerlo de la agresión, respondiendo Cota con golpes y puñetazos a las mujeres. Leyva prosiguió su trabajo, denunciando al aire los hechos, mientras a las ambientalistas las golpearon y empujaron contra los árboles.

Por su parte Adriana González, quien fuera aventada contra un árbol fue detenida y remitida a la Comandancia Sur de Hermosillo, acusada de “obstruir labores de la policía”, por lo que el juez calificador Sergio Chávez le fijó una multa de 36 salarios mínimos que equivalen a mil cuatrocientos pesos.

La acción policiaca se justificó por parte del Ayuntamiento de Hermosillo, a través de boletín de prensa en donde se explica que “lamentablemente una persona que se encontraba entre los manifestantes perdió el control y comenzó a agredir física y verbalmente a los elementos de seguridad, por lo cual tuvo que ser puesta a disposición del juez calificador de la comandancia de la zona sur por faltas al bando de policía y buen gobierno”.

Quienes después de la agresión a las manifestantes procedieron a tomar sus alimentos, argumentaron que en todo momento hicieron ver a las y los activistas que su finalidad ahí “no era represiva, ni de llevar a cabo detenciones”, mucho menos confrontarlos ni responder a provocaciones de su parte, simplemente asegurarse de que no corriera riesgo la integridad física de alguno de ellos ya que se está trabajando con maquinaria pesada, motosierras e iban a empezar a caer troncos secos de los árboles y “no queríamos que se arriesgara la integridad de nadie y que esto le acarreara problemas legales a la empresa" señaló Ramsés Arce.

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